- Ingredientes para 2 personas: 200 g de noodles, 150 g de secreto ibérico, ocho arbolitos de brócoli, un trozo de puerro de 4 cm, 100 g de setas, cuatro cucharadas de salsa de soja, 400 ml de caldo de verduras, katsuobushi (copos de atún deshidratado) para espolvorear sobre el plato terminado, 1 pimiento verde italiano, 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra, semillas de sésamo para decorar, sal y pimienta al gusto.
Elaboración: Cortamos el pimiento verde en trozos y el puerro en rodajas. Los freímos a fuego vivo con un poco de aceite de oliva y unas gotas de aceite de sésamo en un wok o en una sartén honda hasta que se doren. A continuación agregamos los trozos de brócoli cortando los arbolitos por la mitad. Incorporamos la carne, cortada en porciones que sean fáciles de comer. También añadimos las setas y cocinamos el conjunto hasta que todo haya comenzado a tomar color. En ese momento, agregamos la salsa soja y salteamos para que todos los ingredientes se impregnen. Agregamos el caldo de verduras (o si lo preferís, también podéis utilizar un buen caldo de pollo), y dejamos que cueza a fuego vivo. Mientras se cocina todo a fuego máximo en la sartén o wok, ponemos a cocer la pasta yakisoba sin gluten y cuando recupera el hervor, contamos tres minutos. Sacamos la pasta del cazo y la pasamos a la sartén donde tenemos el resto de ingredientes en marcha y dejamos que cueza todo junto durante un minuto más. Servimos en platos hondos y espolvoreamos con unas semillas de sésamo y con unos copos de katsuobushi, que darán un toque muy especial a esta receta de pasta de inspiración oriental, apta para celíacos y que gustará a todos. Por supuesto, puedes adaptar los ingredientes del salteado a tus gustos y a lo que tengas en casa.